El ensayo de tracción indirecta es una prueba fundamental en la caracterización de adoquines, ya que permite evaluar su resistencia a las tensiones de tracción, que son las que suelen provocar la falla en este tipo de elementos. Esta resistencia es crucial para garantizar la durabilidad y el buen funcionamiento.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE?
Predicción del comportamiento en servicio: Al conocer la resistencia a la tracción indirecta, se puede predecir cómo se comportará el adoquín frente a las cargas que soportará en servicio, como el tráfico vehicular.
Control de calidad: Permite verificar si los adoquines producidos cumplen con los requisitos de calidad establecidos en las normas técnicas y en el proyecto.
Selección de materiales: Ayuda a seleccionar el tipo de adoquín más adecuado para una aplicación específica, en función de las condiciones de carga y el entorno.
Evaluación de daños: Permite evaluar el grado de deterioro de adoquines expuestos a condiciones ambientales adversas o a cargas excesivas.